Se ha presentado como amiga, en muchos países. El nuestro fue uno de ellos, uno más que cogió el anzuelo de esta ideología que se presentó como una buena teoría, ilusionándonos con enriquecernos, pero nos dimos cuenta de su segunda cara.
Decía favorecer a las empresas privadas, impulsándote así a crear un negocio propio y que todos los servicios e incluso los básicos pasen a manos privadas, ¡Caímos en la trampa! ¡Caímos en la trampa!, diría el viejo que fue convencido aunque con algunas dudas…
Esta gran amiga, de doble cara no es más que el neoliberalismo, que viene debilitando las economías en diferentes países, como EE.UU, Asia, Latinoamérica y Europa, favoreciendo a terceros.
¡Libre comercio! , quizás muchos corazones agito esta frase, al tener una esperanza de crecimiento, el viejo tenía razón, era demasiado bueno para ser verdad… y pensar las horas que nos pasamos discutiendo sobre el tema… ¡Ahora, comprendo!
El lamentable suceso del “baguazo”, donde los pobladores luchaban por sus tierras cuando el estado pretendió venderlas, con la excusa de crecer económicamente… lo que crecía era su panza. Como pretendemos crecer económicamente, si vendemos nuestros recursos, no tenemos ni la mínima preocupación por cuidarlas…
Al parecer no solo la moda es retro, sino también las ideologías. Aun muchos candidatos, apuestan por el sistema o reforma neoliberalista, tengamos cuidado con esos candidatos presidenciales que dicen buscar el bien común, pero solo buscan el bienestar de sus bolsillos.

Después de todo mi abuelo tenía razón...